Escombros

Enero de 2007. Llevaba varios días cubriendo el desmantelamiento de uno de los históricos gasómetros de baterías de Coque de Avilés, observando como día a día aquel gigantesco monstruo, uno de los tres que se levantaban al lado del antiguo edificio de telefónica, era despiezado a golpe de soplete y radial dejando un rastro de escombros caídos frente a las nuevas naves del PEPA que iluminaban tenuemente las farolas de la calle principal.

Un trabajador corta a soplete los restos de uno de los gasómetros de Llaranes. Avilés, 3 de enero de 2007. © Miki López

Un trabajador corta a soplete los restos de uno de los gasómetros de Llaranes. Avilés, 3 de enero de 2007. © Miki López


Esperé a la oscuridad temprana de los primeros días de enero para conseguir que la luz del atardecer compensara algo la iluminación del soplete manejado con destreza por aquel trabajador ya entrado en años. Al fondo se recortaba a contraluz la imponente chimenea del Sinter, indultada del derribo años atrás para convertirla en el símbolo totémico del Avilés de los altos hornos, de las acerías y de los trabajadores que huían de la mísera postguerra franquista. Comenzaba 2007 y los avilesinos no éramos muy conscientes de que entrabamos de cabeza en una nueva era, una era marcada por una de las peores crisis económicas e institucionales de nuestra historia moderna. Como en aquellos inicios de los años 50, como al final de la época de las vacas gordas de estos primeros años del siglo XXI, aun seguimos rodeados de escombros. Y pa rato.
Datos técnicos:
Cámara Canon EOS 1D-Mark II
Lente 70-200 mm f 2,8 a 85 mm
Velocidad de obturación 1/80 Apertura f 3,2
ISO 800